Conversamos con el seleccionado nacional de Vóleibol y egresado de Kinesiología U. de Chile, Gabriel Araya, sobre la clasificación de Chile a la máxima cita de esta disciplina, la segunda tras 43 años.

Mundial de Vóleibol Masculino

Esta jornada se confirmó la clasificación de la selección chilena al Campeonato Mundial de Vóleibol Masculino, a realizarse el próximo año en Filipinas. Se trata de un momento histórico que viene a consolidar el buen trabajo realizado por el plantel.

Una cita a la que Chile volverá tras 43 años, luego de asegurar su cupo por ranking (puesto 27). En su primera participación, el Campeonato Mundial de Argentina en 1982, nuestro país terminó en la ubicación número 23.

Gabriel Araya

Gabriel Araya, seleccionado nacional de vóleibol y kinesiólogo de la U. de Chile

Un momento histórico que cuenta con un protagonista de la Universidad de Chile entre sus filas. Se trata de Gabriel Araya, seleccionado nacional, kinesiólogo y quien durante sus años de estudios representó a la selección de vóleibol U. de Chile. 

Conversamos con él sobre esta clasificación, sus impresiones y expectativas:

¿Cuáles son tus sensaciones luego de que se confirmara esta clasificación al Mundial de Vóleibol?

Es un sentimiento de alegría y pura emoción. Clasificar a un mundial adulto es algo con lo que bromeábamos hace años cuando estábamos en categorías inferiores, siempre viéndolo como un sueño lejano. 

Aunque como generación logramos clasificar por primera vez a un mundial sub-19 en 2013, esto es un paso gigantesco en comparación. Hoy, la alegría que sentimos es impresionante.

 

¿Cómo ha sido el camino para lograr esta segunda clasificación?

Ha sido duro. Ha habido de todo: momentos en los que estábamos muy arriba, felices, motivados, creciendo entrenamiento a entrenamiento, y otros días no tan buenos, donde la energía faltaba o el cansancio era abrumador. En esos momentos, surgen dudas, ya sea por el rendimiento personal o por resultados negativos. Pero a pesar de todo, nunca perdimos el empuje y la energía de dar lo mejor como equipo.

Antes de que se anunciaran las bases de clasificación para este mundial, lo veía como un sueño distante. Mis objetivos estaban más enfocados en los campeonatos regionales o en mi carrera personal, ya que sinceramente veía muy difícil que pudiéramos clasificar. Pero cuando supimos que el mundial de 2025 tendría 32 cupos, esa ilusión o sueño se hizo mucho más real. 

Nos propusimos la clasificación como objetivo, enfocando entrenamientos, partidos, campeonatos, e incluso las temporadas en el extranjero, con ese norte en mente.

 

¿Cuáles son tus expectativas de cara a esta participación?

Si me preguntas hoy, mi expectativa es mostrar a Chile en el panorama mundial del voleibol. Aunque cada año hay más jugadores chilenos en el extranjero, aún es difícil que un equipo busque directamente en Chile. 

Quiero mostrarles a todos los jugadores chilenos, especialmente a los más jóvenes, que aunque requiere un esfuerzo y dedicación impresionantes, se puede hacer de esto un estilo de vida y que es posible verlo como una opción laboral, más que como un simple taller o algo recreativo.

 

¿Deseas enviar algún mensaje a la comunidad U. de Chile para que apoye a esta selección?

Sé que quienes están interesados en el vóleibol, ya sean estudiantes, profesores o cualquier persona que disfrute de este deporte, nos van a apoyar. Lo digo por todos los mensajes que he recibido esta mañana, de verdad es un gusto sentir que comparten esta alegría con nosotros, y les agradezco mucho a cada uno de ellos.

A la comunidad de la Universidad solo me gustaría decirles que aprovechen las competencias universitarias, que disfruten de ir a ver un partido y de aprender de otros deportes. Probablemente haya alguno de sus amigos o compañeros compitiendo, y de seguro pueden aprender de una disciplina que quizás no conocen tan bien, y puede que terminen disfrutando de las competencias tanto como los deportistas.