“Queríamos crear talleres para personas que no realizan deporte constantemente, para que vayan después de una clase a hacer este tipo de ejercicios».
Así explica Camila Arancibia cómo surge la idea de realizar el taller de salsa y bachata en el Campus Juan Gómez Millas. La estudiante de administración pública es parte del área de extensión del Centro Deportivo de Estudiantes (CDE) y es la coordinadora de los “Talleres CDE”, que se iniciaron el 3 de agosto con dos clases semanales y contarán con 24 sesiones para finalizar la segunda semana de noviembre.
Los lunes y miércoles entre las 14:00 y 15:30 horas, en la sala multiuso del Campus JGM, se realiza el taller de salsa y bachata a cargo del profesor Eduardo Pinto. Ni siquiera la lluvia ha sido impedimento para que por clase asistan en promedio 30 estudiantes de distintas unidades académicas de la Universidad de Chile.
“El público objetivo no es el deportista que necesariamente está en una selección, sino que aquella persona que tiene un break. La mayoría ni siquiera va con ropa deportiva, sino que va con la ropa que usa normalmente. Están súper entusiasmados, todos participan”, comenta Camila Arancibia.
En su inicio, cerca de 50 estudiantes se inscribieron en la convocatoria que impulsó el CDE, “pero es súper abierto. En el camino se ha sumado gente que no estaba inscrita en su inicio. No es necesario que esté inscrito, sino que el estudiante va y participa», explica la coordinadora del taller sobre la posibilidad de que nuevos estudiantes se puedan integrar. “Algo que motivó mucho a la gente es que no se exige asistencia obligatoria”, agrega.
Recreación para todos y todas
Eduardo Pinto, profesor a cargo del taller de salsa y bachata, cuenta que la experiencia ha sido excelente: “Viene siempre el mismo número de gente y son súper motivados. Con lluvia y todo igual vienen. Algunos están cerca, pero otros vienen de otros lados e igual llegan. Entonces se nota que quieren aprender y les gusta venir a las clases”.
Los estudiantes que asisten avanzan a un nivel parejo y nadie se queda atrás. Esa es una de las motivaciones que destaca el profesor: “Han aprendido rápido y se motivan, lo que significa que como profesor estoy haciendo bien el trabajo”.
“El objetivo de esto es ser de tipo recreativo. Como los chicos están muy estresados con sus trabajos y estudios de la universidad, vienen un ratito a relajarse, a pasarlo bien y a compartir”, agrega.
Carlos Carrillo estudia Sonido en la Facultad de Artes, en la sede de Santiago Centro. A pesar de la distancia geográfica de su facultad con el Campus Juan Gómez Millas, asiste al taller porque, según reconoce, “uno sale de la rutina y se desestresa. Quedo más tranquilo de todo. A mí me ayuda harto. Uno después se puede concentrar más en todo lo que tiene que hacer. Es bueno por todos lados».
Alejandra Doren estudia Química y Farmacia y también es una de las asistentes al taller. Se enteró por un amigo y si bien se integró semanas después del inicio de éste, ya tenía nociones de salsa. “Es necesario que se haga este tipo de talleres. y es necesario que se haga en todos los campus, además. Yo vengo de Campus Norte a Juan Gómez Millas”, opina.
El taller de salsa y bachata de JGM es parte de los proyectos que este año se propuso el área de extensión del CDE, además de la realización de dos seminarios y dos juegos deportivos (en Juan Gómez Millas y Antumapu). A ello se suma el taller de entrenamiento funcional que comenzaría en septiembre en la Facultad de Odontología a cargo de un profesor de crossfit.
“La proyección que tenemos es generar nuevos talleres para el próximo año y que esos talleres queden instalados dentro de las facultades, para que ellas mismas lo puedan sustentar por el éxito que tienen”, finaliza Camila Arancibia.