El mejor duelo disputado en el CAR por la final olímpica resultó ser el de damas en voleibol. Ratificando lo exhibido en sus participaciones anteriores en la cancha de Cordep, en plena ronda de clasificaciones, ahora en la finalísima las representantes de Química y FEN brindaron un cometido digno de ser presenciado. Se debió iniciar la premiación de las otras especialidades al dilatarse el término del duelo, que en definitiva fue para las damas de blanco, tras ganar el quinto set definitorio.
Todo parecía fácil para la Facultad de Química. Si bien el primer set culminó con un estrecho 25 a 23, la segunda manga fue lapidaria, imponiéndose 25 a 12. Hasta ahí todo indicaba que en el siguiente juego terminaría el partido. Nada más alejado de la realidad. Ocurre que apelando a un aplaudible amor propio, las chicas de FEN ganaron el tercero por 25 a 20, en una manga en la que siempre fueron arriba en el marcador. No como en el primero, donde estuvieron empatadas a 8, a 9, a 11, a 12, a 13, a 16, a 17, a 21, a 22 y a 23. Hasta que Química sacó ventaja al final.
Aun así, venía el cuarto set, donde las favoritas también podían abrochar la llave. Pero la sorpresa se instaló definitivamente en el recinto aledaño al Estadio Nacional: las pupilas de Carlos Medina se impusieron 25 a 17. Todo después de comenzar empatando a 2, a 4, a 5 y a 6. Eso hasta que le correspondió sacar a la número 4 de FEN, María Fernanda Jáuregui, quien aseguró varios puntos consecutivos con su buen voleo desde el fondo.
Así llegaron al quinto set, esta vez a 15 puntos. Y esta definitiva manga también partió de forma pareja, llegando a quedar 4 a 4. Pero después, la Facultad de Química se desprendió en el marcador, hasta que llegó el punto definitivo anotado por la número 14, Pía Gaete. Fue el 15 a 9 final. El que dio paso a los aplausos de la concurrencia.
Cristián Adriazola: “Esta generación de Química es una excepción”
El joven estratega de Química estaba eufórico. Por eso celebró como si fuera un jugador más. Minutos antes sus muchachas retomaron la senda extraviada en los dos set intermedios, alcanzando a reaccionar a tiempo.
“Ellas (las rivales) se jugaban su última carta, por eso entraron con todo en el tercer set, al tiempo que mis jugadoras sintieron esa presión y no pudieron aguantarla. En los set perdidos entramos “paveando”, pero felizmente reaccionamos en el quinto, ganándolo fácil. Estas niñas vienen haciendo un gran trabajo, siendo muy meritorio porque pertenecemos a las facultades más chicas. Esta generación de Química es una excepción y lo bueno es que varias de nuestras jugadoras van en primer año, por lo que nos quedan varias temporadas para rendir a gran nivel. Encuentro excelente que la universidad promueva el deporte todo el año con los Torneos Inter Facultades (TIF) y con estas olimpiadas, lo que permite a las chicas despejarse de la parte académica”.