En el primer año de este certamen frente a la Católica, los participantes azules destacaron que fue una buena instancia de competencia y convivencia deportiva estudiantil.
Texto: Javiera Mera / Fotografía: Consuelo Mujica
En una emocionante, pareja y estratégica jornada de viernes en el Polideportivo Juan Gómez Millas, nuestra selección de Ajedrez no logró vencer a su similar de la Universidad Católica en duelos extremadamente peleados.
Comenzó la tarde con nueve duelos en vez de diez, ya que faltó un integrante de Católica. Al terminar la ronda con los participantes exhaustos, la Casa de Bello venció por 5 ½ -4 ½ a la visita debido a que no llegó el participante de la PUC (W.O), por lo que el técnico azul Hernán Domínguez dejó pasar la situación y prefirió jugar una segunda ronda de desempate. En esta etapa el elenco cruzado salió victorioso.
La participante de la escuadra laica que destacó fue Monserrat Morales, no solo por ser la única mujer que compitió, sino también por su gran rapidez al ganar. A pesar de la derrota grupal, hizo un gran balance por su nivel individual “feliz de ganar, tras una semana de cierre de semestre (…) es buena esta instancia, ya que nos toca enfrentarnos a nuestro rival directo en los Nacionales. Esto sirve para mejorar el nivel de competencia”.
Finalmente, el técnico azul Hernán Domínguez, aseguró que esta instancia sirvió para probar a jugadores que normalmente no juegan en el equipo titular y experimentar a quiénes no han jugado nunca. Asimismo, agregó que su objetivo principal “es obviamente defender el título en los Nacionales”.
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