La escuadra dirigida por Jaime Infante desplegó un fútbol muy inteligente y supo golpear en los momentos justos para quedarse con un contundente 4-1 a su favor.

Fotos y texto: Benjamín Peralta Lepe.

Una verdadera fiesta se vivió en el Campo Deportivo Juan Gómez Millas, recinto que albergó una nueva final de los Juegos Olímpicos Estudiantiles (JOE) de Fútbol. En esta oportunidad, el cuadro dueño de casa goleó por 4-1 a su par de Medicina y se alzó como el nuevo campeón del balompié de la Universidad de Chile.

El cuadro aurinegro comenzó bastante dubitativo y le costó varios minutos encontrarse en el campo de juego, instancia que aprovechó Medicina para llegar al arco defendido Christopher Lara, pero sin mayor peligro.

La apertura de la cuenta llegó en los pies de Patricio Olivares (11’), quien aprovechó una gran jugada personal de Diego Salas y solo tuvo que empujar el balón para colocar el 1-0. De ahí en más, ambos equipos se refugiaron en campo propio, sin arriesgar demasiado y con escasas oportunidades en el arco rival.

En el complemento llegaron las emociones. A los 53 minutos José Luis Pérez pudo liquidar el encuentro, pero Matías Zamora estuvo notable para evitar el tanto para Juan Gómez Millas. Y como goles que no se convierten en un arco se hacen en el otro, Nicolás Díaz (55’) instaló la sorpresa en el reducto de Ñuñoa y puso el empate 1-1.

Los dirigidos por Jaime Infante sintieron la paridad, por lo que adelantaron sus líneas y se fueron con todo en busca de la ventaja en el marcador. Fue así que Martín Valenzuela,con un excelente cabezazo puso el 2-1 parcial, gol que encontró una floja respuesta del guardameta Zamora.

Con más ganas que fútbol Medicina intentó ir por el empate, situación que los llevó a dejar muchos espacios en defensa y que Juan Gómez Millas supo aprovechar de buena manera. Un gran pase entre líneas de José Luis Peréz dejó en solitario a Diego Salas (69’), quien no tuvo complejidad para sacarse al arquero y con el arco desguarnecido poner el 3-1.

Minutos más tarde (78’) y cuando el partido ya expiraba, fue el propio Salas quien armó una jugada de antología y le entregó el balón en bandeja a Benjamín Villanueva, futbolista de JGM que solo tuvo que tocarla para desatar la algarabía gomézmillana y sentanciar el marcador con un claro 4-1.

Consumado el encuentro, Juan Gómez Millas logró tomarse revancha ante Medicina y se proclamó campeón en fútbol masculino, dejando atrás el subcampeonato obtenido el año 2018.

LA FIGURA DEL PARTIDO

El estudiante de Pedagogía en Matemáticas y Física, Diego Salas, se mostró emocionado por el logro obtenido y no tuvo más que palabras de elogios para el plantel.

«El equipo es espectacular. Son hartas generaciones donde los muchachos no pudieron ganar los JOE, más aún cuando el año pasado estuvimos ahí y creo que ahora nos tomamos una justa revancha, la cual la merecíamos por todo lo que habíamos trabajado durante el año», aseveró el delantero.

El jugador del encuentro no se quedó ahí y analizó la final ganada ante Medicina, manifestando que «fue un partido bien táctico y peleado entre los dos equipos, no se dieron ninguna ventaja y aprovechamos los espacios que nos dieron atrás, en especial cuando metimos el 2-1 y pudimos golpear cuando ellos buscaban en el empate».

Por último, el futbolista de 21 años no escondió su hambre de triunfo y aclaró que este es el primer éxito de muchos para JGM.

«Siempre es importante seguir y no cansarse de ganar. Eso le decimos a los chicos que se vienen integrando: que nunca falten las ganas y que seamos competitivos, además de representar y dejar lo mejor parado a Juan Gómez Millas», cerró.