Con una participación de más de 3.000 corredores este domingo 18 de noviembre se realizó la Segunda Corrida de la Universidad de Chile, en el marco de los 170 años desde la fundación de la casa de estudios. En dos distancias —cinco y diez kilómetros— una amplia gama de personas, desde estudiantes secundarios hasta personas de más de 70 años fueron partícipes de la jornada dominical, cuya largada fue dada por el vicerrector de Asuntos Académicos, Patricio Aceituno.
“Con este gran evento estamos cerrando las celebraciones del 170 aniversario de la Universidad de Chile, que ha contado con el apoyo de la Dirección de Deportes y Actividad Física (DDAF) y Deporte Azul”, dijo la autoridad minutos antes de que él mismo iniciara su recorrido de los cinco kilómetros, en compañía del Director de la DDAF, Daniel Muñoz, tal como lo hacía el resto de los corredores que se dieron cita en el frontis de la Facultad de Derecho, en Pio Nono.
Este año la competencia se realizó en 20 categorías. En el caso de los cinco kilómetros se trató de las categorías —en damas y varones— mechón Universidad de Chile, estudiante Universidad de Chile, egresado Universidad de Chile, académico o funcionario Universidad de Chile, estudiante de enseñanza media y competencia general. En los diez kilómetros los varones pudieron competir en 17 a 19 años, 20 a 39 años, 40 a 49 años, 50 a 59 años y 60 y más años; mientras que las damas lo hicieron en 17 a 19 años, 20 a 34 años, 36 a 44 años, 45 a 54 años y 55 y más años.
Éste fue precisamente una de las virtudes que destacó Mario Silva, de 75 años, mientras se alistaba para participar en los 10 kilómetros. “Lo importante es que una competencia tenga varias categorías senior. Especialmente una sobre los 70 años, porque es mucha la diferencia física entre una persona de 50 años y una que tiene dos décadas más”, dijo el corredor, que en su categoría ha resultado campeón nacional y sudamericano.
En el mismo sentido, Mario Azócar, de 70 años, destacó que él participa en esta competencia porque sus tres hijos estudiaron en la Universidad de Chile y por ello siente una afinidad por esta casa de estudios. “Un gran aporte de esta corrida es su organización. Entre las corridas que son gratuitas se distingue por eso”, indicó mientras caminaba rumbo al punto de partida. En dicha idea fue secundado por Guillermo Apablaza, quien añadió que ellos se habían enterado de la realización del evento por internet.
También por internet y la página de Facebook se enteró de la corrida el estudiante del Instituto de Asuntos Públicos (INAP), Daniel Olguín, quien junto con su compañero de carrera Teddy Gutiérrez dijeron que “lo importante es que estamos participando de un gran acontecimiento, que es la celebración de la Universidad de Chile. También asistimos a otros eventos, como el concierto de la Orquesta Sinfónica, pero esto nos hace sentirnos como dentro del aniversario”.
A su vez, Karin Hernández, quien compitió en la categoría de los cinco kilómetros en calidad de egresada —perteneció a la Facultad de Derecho— dijo que se enteró de la competencia por su hermano, quien estudia en la Facultad de Economía y corrió en calidad de estudiante, y destacó “la calidad del recorrido. Además, la organización ha sido buena en cuanto a la entrega de alimentos y de agua durante el trayecto”.
Su hermano, Rodrigo, quien corrió en los 10 kilómetros, destacó que “si bien no participé en la corrida del año anterior. Este año me enteré por la página de Facebook de Deporte Azul y me interesó venir a correr. La organización ha sido muy buena y eso es bastante significativo tomando en cuenta que se trata de un evento gratuito, al que puede asistir cualquier persona. Otras corridas gratuitas no tienen este grado de preparación.
De una opinión semejante fue Nicolás Westermeier, estudiante de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, quien resaltó que “el hecho de este se trate de una corrida gratuita resalta la naturaleza pública de la Universidad de Chile. Participé en la corrida del año pasado y a mi juicio ésta es una gran forma de identificarse con la labor de la educación superior. ¿Cómo alguien se podría un acontecimiento como éste, más todavía en los 170 años de la universidad?”, indicó.
En tanto, Giovanny González, estudiante de segundo medio del Liceo de Aplicación, quien salió segundo en su categoría en los cinco kilómetros, destacó que este año “la información acerca del evento fue mucho más temprana. El año pasado supimos que iba a realizarse la corrida como una semana antes. Ahora, ya hace un mes se sabía del evento. Se nota la preocupación para que asistan personas”, destacó a lo cual su padre, Marcelo, quien también participó en los cinco kilómetros, sugirió plantear un trayecto en que primero se suba y luego se baje.
Mientras, la estudiante mechona de la FCFM Gabriela Saavedra, quien salió segunda en su categoría, dijo que “participé porque esto es algo completamente nuevo para mí. Habitualmente no corro en este tipo de acontecimientos, pero ahora es algo diferente porque se trata de un acto en que se reúne toda la comunidad de la Universidad de Chile”.