Tarde de fútbol. Así fue la del viernes 26 de octubre en el Campus Juan Gómez Millas. Una reunión triple donde los diferentes grupos establecidos por el fixture dieron rienda suelta a su programación, mezclándose protagonismo masculino con galerías femeninas. Compañeras de universidad que no quisieron estar ausentes de ese idilio que provoca la redonda emoción cuando se pone en movimiento en el círculo central.
Los primeros en hacerse presentes en el gramado ubicado de Cordillera a Costa fueron los representativos de Juan Gómez Millas y Química. Los primeros, de rojo; los segundos, de gris perla. Un favoritismo que según los comensales pertenecía a los laboratoristas. Sin embargo, el desarrollo del juego dijo otra cosa. Y de manera radical.
Bajo las órdenes del juez Gustavo Ahumada y la supervisión del turno Daniel Carvajal, lo cierto es que la primera media hora parecía dar la razón a los vaticinios. Con un juego más profundo, liderados por la fuerza de su volante José Osorio y la habilidad de su centrodelantero Guillermo Montero, parecía que en cualquier momento los dirigidos por Raúl Astudillo asestarían el primer golpe. Pero ocurrió todo lo contrario, sufriendo desde los doce pasos después.
En la primera fracción vino la estocada inicial, abriendo el marcador los estudiantes de Ciencias mediante penal anotado por Daniel Castillo, su número 3. Fue una falta que no mereció reparos. Como la del segundo gol en el período final, que coincidió con el término del duelo como expresión de lucha. Esto porque el arquero Juan Andrade se fue a las duchas al cometer infracción penal, debiendo ponerse al arco Osorio, lo que significó a Química perder a su motor del medio. El número 10 Pablo Torres estiró las cifras.
Y por si eso no bastara, antes que se cumplieran los 40 minutos, el número 11 Wilson Rojas estableció el 3 a 0 final.
Derecho al éxito
De los tres encuentros jugados, el segundo fue el mejor. Lo protagonizaron las facultades de Medicina y Derecho. Todo comenzó miel sobre hojuelas para los rojos de Manuel Rubilar, abriendo el marcador en la primera etapa merced al penal convertido por Matías Libuy. Lamentablemente, en una jugada casi intrascendente, su lateral izquierdo José Lizama se lesionó.
A esa altura, brillaba con colores propios la figura del número 10 de Medicina: Guillermo González. A sus 26 años, el calvo estudiante de kinesiología destacó por su talento, conduciendo los hilos de su equipo con pases siempre bien dirigidos, pese a su merma física producto de una lesión reciente, lo que obligó a su reemplazo en la segunda etapa.
Y su salida permitió la crecida del rival. Lo empató Oscar Caorsi de penal para Derecho, un lateral diestro de gran proyección. Aumentó su número 7 Nicolás Mena. Y la lápida la estableció Lukas Grez, tal vez decretando un 3 a 1 exagerado, porque hasta 20 minutos para el final lo ganaban los futuros médicos. Lamentablemente sintieron la salida de su capitán.
Guillermo González, talento puro en Medicina
Todas las jugadas ofensivas de su equipo pasaron por él. Mientras permaneció en cancha, era impensada una derrota, porque manejó bien los tiempos en el medio. Empero, su salida dejó un vacío imposible de llenar.
“Tuve que salir porque del partido anterior venía con algunas molestias físicas, por lo que jugué vendado ahora. Como es mi último año tenía que jugar igual, ya que las ganas por llegar a la final en el Estadio Nacional eran muchas. Cometimos errores por falta de experiencia. De hecho, el tercer gol estuvo de más. Yo jugué en Unión cuando chico, aunque en Universidad Católica fui Sub 17, pero los estudios pudieron más. Estoy a dos meses de recibirme de kinesiólogo. Recuerdo que fui compañero de Mark González y Jean Beausejour, quienes iban una serie más arriba, alegrándome mucho cuando los veo por televisión. Ahora el fútbol es mi hobby y soy feliz. En la kinesiología me gusta la parte neuro y trauma de la carrera. Me voy con el orgullo de haber sido el primer capitán no médico de la facultad”.
Miguel Hermosilla, ex DT de Cobreloa: “Vamos a pelear el título”
Conocido por su paso en el fútbol profesional, el famoso “Chueco” Hermosilla siempre destacó por ser además un académico con todas las de la ley, enseñándole mucho más a sus muchachos de cadetes. Ahora a cargo de la selección de la Facultad de Derecho, nos dio su impresión del triunfo.
“Tenemos muy buenos jugadores, que vienen actuando juntos hace tiempo, por lo que nunca hay que bajar los brazos con ellos porque hasta el final darán la batalla. Este equipo ha logrado hazañas increíbles a nivel de Facultades, incluso llegando a la final de la Copa Andina contra las selecciones universitarias. Nosotros fuimos como facultad, de ahí el mérito. La salida del número 10 de ellos fue muy buena para nosotros, porque él estaba manejando los tiempos de su equipo. Esperemos que esta vez no se nos queme el pan en la puerta del horno como otras veces. Creo que vamos a pelear el título”.
Goleada de Ingeniería
Finalmente, el presagio que significó la apertura de los comicios con el tanto de Javier Hormazábal de cabeza para Ingeniería, termino transformándose en goleada, imponiéndose los rojos de Belisario Díaz por 7 a 1 sobre los naranjas de Arquitectura, comandados por el técnico Fernando Cardonne.
Bajo las órdenes del árbitro Felipe González, quien las ofició de primer asistente en los dos iniciales compromisos del día, uno a uno fueron desfilando los tantos hasta materializarse esta performance. El otro equipo de este grupo es Agronomía.