César Tolorza es el técnico de la selección de Karate de la Universidad de Chile desde hace 3 años. Cuando llegó al puesto, el equipo de karate estaba prácticamente desarmado.
Cuando comenzó a practicar karate a los 9 años, después de haber pasado por varios deportes, no le quedaron dudas de que a eso se quería dedicar toda su vida. Compitió activamente desde los 13 hasta los 29 años y logró ser seleccionado nacional, tanto de su estilo, como de la selección chilena de karate. “Haberle dedicado la vida al deporte es lo que me hace feliz sin duda”, cuenta Tolorza, muy orgulloso de sus logros.
Llegó a ser técnico de la Universidad de Chile recomendado por Tomás Herrera, técnico de taekwondo en ese entonces. Sólo tuvo que asistir a una entrevista y lo llamaron avisándole que había sido elegido para el cargo.
Hace tiempo que venía con ganas de trabajar en el mundo universitario pues le parecía interesante cómo se da la competencia en este ámbito. Para César haber empezado en la Universidad de Chile es sin duda un orgullo. “La Universidad de Chile aparte del aspecto deportivo es la mejor universidad, no hay ninguna duda”.
Los valores del karate
César cree que el deporte es muy importante en todos los ámbitos de la sociedad y piensa que es una de las herramientas más eficientes para sacar a los chicos de las drogas. “Al chico dale una pasión y se acabó la droga, se acaban los problemas, soy técnico hace 15 años y he visto cómo el deporte le modifica absolutamente la vida a las personas”.
Cuenta que “una pasión encausa tu camino y ocupa tu tiempo libre. Los chicos de hoy llegan a la casa a jugar computador o a meterse en Facebook y no aprenden nada. En el karate existe compañerismo y ética y eso no se puede entregar en un pizarrón o con un power point, eso hay que aprenderlo en los entrenamientos y en las vivencias que se generan en el deporte.”
Los valores fundamentales que les entrega a sus alumnos son el respeto, la resiliencia y la perseverancia. Para César es muy importante que sus alumnos sepan levantarse después de caer, ya que “de las derrotas es donde verdaderamente se aprende y el deporte te da todos los días nuevas oportunidades, así que hay que r dejar atrás las caídas”.
El técnico valora mucho las conductas que existen en el karate, ya que en un combate de esta disciplina nadie va a quedarse en el suelo simulando ni mucho menos insultar a un árbitro pues serían fuertemente sancionados. Eso es lo que marca la diferencia del karate con los demás deportes.
La competencia universitaria
Cuando César Tolorza comenzó a hacerse cargo de la Selección de karate de la Universidad de Chile el equipo estaba desarmado, por lo que tuvo que empezar prácticamente de cero. Tres años más tarde el equipo está muy bien armado tienen hasta 2 o 3 competidores por categoría.
César ha logrado contactar a deportistas que practican afuera y los ha motivado para que entrenen en la Universidad, por lo que el equipo de karate ahora es muy competitivo. Sus seleccionados son “comprometidos, valientes y sin duda, perseverantes” y piensa que puede lograr grandes cosas en el futuro.
La idea de César es estar en unas olimpiadas universitarias. Dice que hoy el karate es calificado como un deporte de categoría C y pretende que esté mejor considerado para poder participar de esas instancias, ya que en este momento hay estudiantes de muy alto nivel.
Tolorza espera que se le dé un poco más de apoyo al karate. En sus palabras, “no es el deporte más vistoso, pero que posee un equipo muy potente y se seguirá reforzando ya que hay muchos jóvenes que entrenan karate de 3° y 4° medio y que entrarán a competir por la Universidad en los próximos años”, asegura.